Ya sabeis que ultimamente ando peleona con el tema de la acción social.
Creo firmemente en la necesidad de crear plataformas de pensamiento y acción social para pensar y actuar fuera de los límites de la economía y la política. Es imprescindible empezar a pensar, y que la reflexión sirva para plantear soluciones más allá de la política y la economía. Porque esta sociedad está dormida, solo se queja en privado, no tenemos acceso a la solución pública de problemas que solo queda en manos de unos pocos.
Thinking out of the box (Pensando fuera de la caja) es una organización social, no adscrita a ningún partido político, que he parido (y lo digo literal, porque es un parto, de un ser que tiene que crecer, sobrevivir, pelear, echar a andar, hablar, equivocarse, aprender a asumir responsabilidades y......vivir) para dejar de hablar y ponerme en marcha de una vez.
Thinking out of the Box nace para re-inventar el futuro, para re-evolucionar como humanos, para pensar fuera de los límites establecidos de la política y la economía y conseguir pequeños pasos adelante para el cambio universal.
Thinking out of the Box es un observatorio del pasado y el presente que vive en el futuro. Va a estar formado por todos aquellos que quieran pensar fuera de la caja: de todos los ámbitos, de cualquier profesión, que trabajen o no, que quieran pensar para poder ejercer presión en los núcleos de poder.
¿Te sientes representado por las propuestas políticas de nuestros partidos? ¿Crees que las ocho horas durante casi 24 años que pasamos en las aulas sirven para algo más que para ser adultos que producen? ¿Sientes que la imaginación y la reflexión social necesitan un hueco en la política y en la economía? ¿Sientes que hay que pensar en nuestro día de otra forma más profunda que en simples jornadas laborales? ¿Quieres participar en el futuro? ¿Crees que la investigación es mucho más que investigación científica? ¿Crees que las ideas deben estar por delante de las acciones? ¿Sabes lo que quieres pero no puedes contarlo o no te dejan contarlo? ¿Te gusta la vida pero no puedes vivirla porque te han hecho creer que comprando una casa a un banco ya la tenías solucionada? ¿Crees que hay formas lógicas de repartir el trabajo, el dinero, la ilusión, el pensamiento, el arte, la cultura, las decisiones que nos afectan a todos? ¿Quieres trabajar, por fin, para que esto funcione algún día, aunque ya no estés aquí? ¿Crees que la belleza es más que una bonita nariz?
Si sientes un interés inicial, y quieres saber más, mándame un correo a rosa@alzatebranding.com, y te contaré el plan de acción, el método, quiénes somos, y cuáles son nuestras perspectivas.
Solo se trata de agarrarte a mi cintura, que otro se agarre a tí, que seamos una serpentina de gente que piensa, que aporta lo que sabe, que pone un pie delante del otro sin miedo...Una tira de gente que quiere llegar al futuro dando saltos, con una sonrisa, con ganas, con esfuerzo, con objetivos...Y sobre todo con mucha fuerza. Escucharemos a gente que tiene algo que decir, hablaremos sin miedo, y nos sentiremos vivos porque somos capaces de construir soluciones.
OS NECESITO A TODOS, NO ES DIFÍCIL, SOLO ES UN PEQUEÑO ESFUERZO QUE MERECERÁ LA PENA. CUANTOS MÁS SEAMOS, MÁS CONSEGUIREMOS.
AMIGOS, QUE NO NOS PARE EL MIEDO
El miedo como argamasa.
ResponderEliminarEs posible que el miedo, su comprensión y sublimación, sea el sentido de (mi) vivir, si es que tal cosa existiese. Pasa el tiempo y las profecías se van cumpliendo. Los mayores tenían razón en tantas cosas…, pero supongo que la ley es aprenderlas en primera persona. Que ése es el único y real modo de aprender (hacer caso de lo que te dicen resulta tan antipático…).
El ser humano, y la sociedad que esta forma de vida genera, ha ido siempre trabajando a pecho descubierto. De lo más básico, con el transcurrir del tiempo y su observación, se acaba por tener ideas, de las que a veces salen proyectos, los cuales a veces construyen realidades. Y si estas realidades “funcionan” se van fijando y estratificando, y pasan a formar parte de esos “irrenunciables” que todo proyecto social tiene. Pero con el paso del tiempo y su no-observación éstos irrenunciables, éstas casi Verdades Absolutas, se convierten en elementos rigidizantes, en no-acción. La confianza en lo que funciona es el sustituto de lo antaño sagrado, es la reacción ante la pereza y el esfuerzo, es el miedo a lo nuevo y al vacío.
No hay verdades absolutas, sino lugares más o menos útiles a la sociedad. Y todo proyecto social, en su más amplia acepción, requiere siempre de observación y perfeccionamiento. El ser humano actual debería de sentirse a sí mismo como hacedor del camino y no como defensor (y mucho menos rey) de la colina de los logros. Si tenemos claro que no existe el sistema perfecto ¿por qué lo olvidamos y nos empeñamos en idolatrar los logros? No podemos dejar atrás aquello que funciona sin tener opciones que lo mejoren, pero tampoco podemos estancarnos en la mejor posibilidad que conocemos sin buscar otra mejor.
Con la razón y el desarrollo de la ciencia se han podido conocer y explicar lo que fueron enigmas, y el propio desarrollo de las disciplinas es el que ha permitido ir ampliando el conocimiento y las posibilidades de avanzar. Lo que hoy, desde los supuestos de la ciencia y la razón es algo “mensurable y demostrable”, no lo era en el pasado. Lo que mañana sea “mensurable y demostrable” desde la ciencia y la razón siempre en desarrollo, hoy no tenemos herramientas ni tan siquiera para imaginarlo, aunque ya ocurriese desde los albores de la creación. Lo cuantificable hoy, no es más que una realidad relativa.
Sé que la belleza es más que una bonita nariz. Y sé que la aceptación de que ambos, ser humano y desarrollo social, van más allá de lo cuantificable es el lugar de partida. Y la primera muestra de ello es que tanto economía como política está creado y dirigido por el ser humano desde lo cuantificable, y por este motivo adolece del defecto de lo inapropiado, de la inexactitud.
No tengo modelos alternativos, pero sí tengo discernimiento. No tengo propuestas, pero sí tengo y uso la capacidad de re-conocimiento de lo que me rodea. El ser humano no es una máquina.
Pero no me quejo, no me duele España, no me duele el ser humano, y prefiero pensar en que no hay proyectos malos, sólo mejorables. No permitamos que el cambio y el miedo nos bloqueen e inmovilicen, no permitamos que el miedo siga siendo la argamasa del muro de la no-comprensión y de las limitaciones.
Jó, Rosa, suena todo demasiado bien para intuirlo viable.
ResponderEliminarYo hace tiempo que me divorcié de la sociedad en este sentido. Y mucho antes de los políticos, las instituciones, los altos cargos, los poderes eclesiásticos,el dios dinero, la droga materialista e imperialista, y un largo etc.
Yo cada día intento que la gente que haya estado conmigo, aunque solo sea un minuto, se vaya con una sonrisa.Pero lo peor de todo es que con el tiempo he aprendido a no esperar nada a cambio, a no esperar que el otro haga lo mismo que yo, porque me puedo morir de aburrimiento.
Somos unos hipócritas de campeonato y desde luego que no sé si habrá vida inteligente en otros planetas, pero seguro que en el que llamamos tierra no.
Un beso y ya tienes mi email. Mándame toda la info, please.